jueves, 16 de junio de 2011

Mi manifiesto.

Carta dirigida al movimiento DRY y a todos los que formamos este País.

Estimados amigos,

Sólo soy un simple ciudadano sin trabajo como vosotros. Espero que podáis leer esto libres de prejuicios y de pensamientos. Sólo leed y pensad con el corazón y una mente abierta. Sólo os pido eso y una cosa más: PARAD ESTO.

He visto lo que ha pasado hoy en el Parlament. He visto las imágenes que los medios de comunicación me han dado y videos que habéis colgado en Youtube. Y he visto a personas, que seguro no eran policias, insultar a otras personas, escupir a otras personas, echarle cubos de agua a otras personas, pintar la gabardina a otra persona y tratar de robar un perro a un invidente. Esas personas son diputados, elegidos democráticamente por una cantidad de personas muy representativas de nuestra población. He visto días atras como un grupo de personas perseguía y agobiaba a otra persona que es el alcalde de Madrid elegido democraticamente por mayoría absoluta por una grandísima cantidad de personas. No sé si es causa directa vuestra, pero sí sé que es consecuencia directa vuestra, y os guste o no, sois responsables.

Esto es a lo que se enfrentan los políticos. Criticáis a una minoría que mancha vuestro nombre, pero decidme de la gran cantidad de alcaldes, concejales, diputados, etc. que existen en nuestro país, ¿qué porcentaje representan los imputados? ¿por qué mancháis el nombre de todos aquellos políticos que luchan de verdad por mantener una democracia y tratar de sacar a este país del enorme problema en el que se ha visto sometido?

¿Dónde estabais hace años cuando España estaba a la cabeza de Europa? ¿Dónde estabais cuando el trabajo no escaseaba o cuando la clase media disfrutaba de uno, dos o incluso tres viviendas y coche de gama media-alta? ¿Dónde estabais cuando el 80-90% de la población de este país disfrutaba de altos ingresos que les permitían niveles altos de vida?
Os equivocáis. La desesperación, entendible, os hace equivocaros. No son las medidas ni las formas adecuadas. Y lo que es peor no contáis con la representación adecuada. Vuestra imagen la componen personas antisistema, personas que distan mucho de querer un beneficio para todos y por supuesto de tener los conocimientos adecuados para saber qué o quién es beneficioso para este país o para el mundo.

Criticáis al sistema pero no hacéis autocrítica. Criticáis que muchos licenciados están sin trabajo. Yo soy casi licenciado y he visto como aprobamos los licenciados de este país. Estudiamos un día, dos, una semana antes para tratar de aprobar, sino lo intentamos utilizando la técnica de copiar. ¿Es esto una adecuada forma de labrarse un futuro? Somos personas que anteponemos una fiesta a una noche de estudio, que recurrimos a las drogas: porros, alcohol, etc. de forma muy habitual porque no sabemos o no conocemos otra manera de divertirnos. Voy por los parques corriendo y veo litronas, olor a marihuana, de forma muy habitual. No son las formas. No son las formas.

Una parte muy representativa de este país sólo conoce un idioma. ¿Por qué no nos preocupamos por aprender algo más? Existen libros, televisiones y ese gran instrumento que todos tenemos en nuestra casa que se llama internet. ¿Por qué no lo utilizamos para aprender? ¿Por qué una mayoría representativa de nuestros jóvenes disponen de perfiles en redes como tuenti, facebook o badoo y se preocupan únicamente de actualizar sus fotos, analizar los perfiles de otros o ver cómo ligar? ¿Es este el futuro que nos va a sostener? Gente desmotivada cuya única preocupación al levantarse al día es conocer cómo esta su red social o cuáles han sido los escándalos que se han producido en el corazón, los deportes, etc. Analizad las noticias top de periódicos de este país. ¿Cuántas de estas noticias son realmente importantes? En un día como el de hoy, a las 0:49 la primera noticia más vista en un periódico nacional es: "Apuñalan a Sean Bean en un bar de Londres", la segunda: "Sexo, alcohol y cumbia, las juergas de Messi". Esto es un reflejo de lo que estáis defendiendo.

Grecia, país al que hacéis referencia, esta una situación extremadamente delicada. Su problema ha sido muy similar al nuestro: vivir por encima de sus posibilidades. ¿Dónde estaban los griegos en la época de bonanza para avisar que viviendo así el país no se sostendría demasiado tiempo? ¿Dónde estábamos los españoles para avisarnos los unos a los otros de que estábamos viviendo por encima de nuestras posibilidades? ¿Dónde? ¿Qué hicimos? Nada. Nos lo recordaba una campaña, pero no dirigida a la economía: "Las imprudencias se pagan, cada vez más". Éramos imprudentes, pero nadie dijo nada. Y ahora que la cosa se tuerce, como era de esperar, buscamos culpables. Como el joven que al día siguiente después de hincharse a copas, culpa al bar de venderle garrafón por la impresionante resaca a la que se ve sometido. O el que culpa a la cocaína de estar enganchado y tirar su vida.

Somos nosotros los culpables de esta situación. TODOS. Posiblemente, exista una mayor responsabilidad en ciertos poderes como son política, bancos o empresas. Pero no nos exhime de la culpabilidad, porque cuando el viento soplaba a nuestro favor no nos preguntamos por qué soplaba a nuestro favor y qué podría suceder si dejaba de soplar, simplemente lo disfrutábamos.

No somos un país árabe sometidos a gobiernos autocráticos. Nosotros ya pasamos por eso y afortunadamente supimos salir adelante. No somos Egipto, no somos Siria. Las movilizaciones no tienen el mismo sentido ni la misma causa. No es lo mismo ponerse a correr para cazar, que ponerse a correr para huir de la caza, aunque el hecho es el mismo.
El daño que hacéis al país es enorme y muy duro. ¿Qué empresa va a querer invertir aquí? ¿Vosotros buscaríais beneficios en países con revueltas? ¿O en países en los que se acampa en las principales ciudades? ¿O en la que se insulta hasta la vejación a sus representantes políticos elegidos democráticamente hace unas semanas?

Yo no sé si el juego es justo o no. Si estáis de acuerdo con las reglas que existen o no. Pero la sociedad ha evolucionado hasta un punto en el que hemos hecho a bancos y empresas motores de la misma. Y si queremos que nuestro motor funcione, necesitamos buenas empresas de nuestro lado. Si queremos buenas empresas podemos alcanzarlas. Entre todos los que estamos aquí. Pero hay que trabajar y saber sufrir. Y el trabajo no sólo es un contrato en una empresa. Es formación, es educación, es esfuerzo y es sacrificio. Y todo ello puesto a disposición de la sociedad, no del beneficio propio.

Porque el nivel de crispación aumenta. Y las fuerzas de seguridad y del estado, que nos han defendido muchas veces de los violentos (y nosotros que estamos en un país con terrorismo tenemos que saber mejor que nadie cuántos se han sacrificado por ello) están actuando contra su pueblo. Y no soy policía, pero sé que tiene que ser duro. Si seguimos por este camino, el desenlace es incierto pero conllevará más violencia. Porque el odio genera odio. Y la violencia y la guerra se alimentan de él. No las deis de comer por favor. Preguntad a vuestros padres, abuelos o mayores, en qué condiciones vivieron cuando el odio se paseaba por este país. No es el camino.
Por favor, PARAD ESTE MOVIMIENTO, para que aquellos que no pertenecen a algo que partía de una buena idea, estén expuestos ante la sociedad y sean condenados.

Existe otra manera, no busquemos fantasmas. Sólo UNÁMONOS y busquemos soluciones en conjunto. Asumamos cada uno nuestra responsabilidad en lo que ha pasado y tratemos de aportar nuestro granito de arena para dar la vuelta a un partido que tenemos en nuestra contra.

Este país fue un gran imperio y este país está compuesto de grandes y valerosas personas, independientemente de sus ideologías, creencias o raíces.

Mostremos al mundo una luz en la que creer.

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